Formas musicales del
Barroco
La música barroca o música del Barroco es el estilo musical
europeo, relacionado con la época cultural homónima, que abarca aproximadamente
desde el nacimiento de la ópera en torno a 1600 hasta 1750. Caracterizada por
la aparición de la tonalidad y el uso del bajo continuo, la barroca fue la
época en la que se crearon formas musicales como la sonata, el concierto y la
ópera.
FORMAS VOCALES
Recitativo: Parte
de la ópera donde el texto se "canta" como si fuera recitado. En realidad
no es una forma vocal bien definida, pero cabe dentro de este análisis.
Aria: Es una
composición musical, o una forma, para una sola voz y con un acompañamiento de
uno o varios instrumentos.
Cantata: Parte de
la ópera donde se alternan el narrador y los diferentes personajes en una
escena lírica sin acción teatral.
Oratorio: En
realidad no es una forma vocal, sino una composición de carácter religioso,
también denominado ópera religiosa, en la cual no hay parte escénica, ni de
actuación, vestuario decorados, etc.
Bel Canto: Forma
vocal caracterizada por libertades interpretativas, donde el uso del rubato
(elasticidad rítmica) y la libre ornamentación la fue llevando a absurdos
excesos. Fue el origen más tarde de la cadenza en el concierto para instrumento
solista.
FORMAS INSTRUMENTALES
El Concerto Grosso: Se
derivó de la escritura para grupos. En esta forma musical, uno o varios
instrumentos se destacan (concertino) en determinados pasajes, en contraste con
la generalmente reducida orquesta (tutti o ripieno). Sus primeros
representantes fueron los italianos Corelli y Geminiani. Más tarde sería el
maestro Vivaldi quien llevaría el concerto grosso a su máxima esplendor. A
partir de él, esta forma tuvo por lo general 3 movimientos
(allegro-adagio-allegro), y se sentaron las bases del virtuosismo de los
solistas en el futuro.
La Suite: Es un
conjunto de danzas contrastantes y en la misma tonalidad (generalmente), pero
con diferente medida y tiempo. Con Bach y Haendel adquirió una estandarización
con cuatro danzas principales: allemande, courante, sarabande, gigue, precedida
por una introducción denominada preludio u obertura.
Preludio:
Introducción. A veces formado mediante la improvisación sobre un tema rítmico o
melódico.
Allemande: Danza
lenta de ritmo binario, de carácter expresivo y melódico.
Courante: De
ritmo ternario, y carácter animado, suele contrastar notablemente con la
anterior.
Sarabande: Danza
lenta, majestuosa e imponente. Un componente infaltable de la suite barroca,
con ritmo ternario, con stress o prolongación del segundo beat de cada compás.
Curiosamente, no tiene relación alguna con la rápida danza con el mismo nombre,
que las postrimerías del siglo XVI fuera prohibida por Felipe II de España por
su carácter lascivo.
Fuentes:
https://es.wikipedia.org/wiki/M%C3%BAsica_del_Barroco